En la actualidad, los usuarios se encuentran mucho más alerta ante irregularidades en sitios web debido al aumento de estafadores en línea.
A medida que se acerca el fin de año, los consumidores destinan gran parte de su tiempo a la búsqueda de obsequios navideños de manera online, pero la pregunta es ¿están realmente preparados para la época favorita de los estafadores?
Mientras las ofertas crecen sin parar y las tecnologías permiten realizar compras digitales de manera cada vez más sencilla y rápida, los ciberdelincuentes trabajan a toda máquina para identificar el más mínimo error de los usuarios y sitios web para convertirlos en víctimas de fraudes.
De hecho, según una encuesta de la empresa de soluciones tecnológicas SAS, realizada a 13.500 consumidores en 16 países, el 70% de los consultados indicaron haber sido víctimas de fraude al menos una vez y el 40% lo ha sido dos o más veces.
Asimismo, la consulta reveló que el 86% de los consumidores admitieron ser más cautelosos que en el pasado, mientras que nueve de cada diez encuestados creen que las organizaciones deben tomar más medidas para protegerse de los estafadores.
“El reto del comercio e instituciones financieras es actuar en consecuencia de los actuales riesgos y ofrecer herramientas que garanticen una compra 100% segura. No siempre se trata de realizar compras en un segundo ni de ser los primeros en llegar a la puerta de los usuarios, esto no bastará si las personas no están exentas de riesgos”, comenta Ignacia Güell, consultora de analítica y gestión de datos de SAS.
En ese sentido, los consumidores se mostraron dispuestos a ceder en una serie de aspectos para garantizar la seguridad en sus transacciones: tres cuartas partes estarían de acuerdo con asumir ciertos retrasos en sus entregas con tal de que se realicen los controles necesarios en las transacciones para una mayor protección.
Asimismo, ocho de cada diez están abiertos al uso de datos biométricos y tecnologías avanzadas para autenticar sus compras mediante contraseñas fijas. Mientra que siete de cada diez están dispuestos a compartir más datos personales con los proveedores de estos servicios con el fin de reforzar la defensa antifraude.
“No cabe duda que la transformación del consumidor no es solo a nivel tecnológico, sino también de conciencia. Ellos, además de los proveedores del comercio, son cada vez más responsables y muestran conocimientos al respecto. Es clave que el comercio electrónico esté en línea con diversas innovaciones como la inteligencia artificial que les permitan identificar fraudes, acciones repetitivas y posibles fugas de información”, explica Güell.
La IA generativa ha tomado fuerza en el último tiempo, herramienta que se ha convertido en la favorita para los estafadores. Es por ello que los consumidores deben estar atentos a diversas alertas como, por ejemplo, sitios web con faltas de ortografía, estafas masivas a través de mensajería con ofertas increíbles, sitios no verificados, redes sociales posiblemente falsas y no hacer clic en cualquier enlace. De esta manera, los consumidores y el comercio tendrán una Navidad feliz.